Hoy, en el Chaco, sentimos un espacio vacío: nos ha dejado Oscar Alcidez Benítez.Un hombre comprometido con su pueblo, un defensor de los derechos de los más necesitados, un militante de la vida.
Oscar egresó de la ERAGIA de Corrientes como técnico rural en 1956 y dedicó su vida a trabajar con los productores familiares de su provincia. En su trayectoria pasó por el INTA, desempeñándose como extensionista y últimamente era Gerente de Capacitación y Desarrollo Tecnológico del Instituto de Colonización de la Provincia del Chaco.
Con su militancia peronista, se involucró en las luchas sociales de los años 70. Cuando llegó la siniestra noche que nos paralizó, aquella que con su oscuridad se llevó tantos amigos y compañeros. Oscar sufrió la persecución, el exilio. Compartió la cárcel con Sergio Tomasella, el recordado luchador de las Ligas Agrarias Correntinas.
Pudo regresar a la Argentina con el regreso de la democracia. Y régreso con el mismo compromiso, poniendo sus esfuerzos en fortalecer las organizaciones de productores, sin olvidar ni bajar nunca las banderas de la justicia social; comprometiéndose en la defensa del medio ambiente; en las luchas por una sociedad sin desigualdades.
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